sábado, 17 de junio de 2017

La supresión de las Órdenes religiosas y, como consecuencia de ésta, las exclaustraciones de los religiosos promulgadas, sobre todo en 1820 y 1835 fue un ataque directo al estamento religioso que defendía postulados absolutistas, tradicionalistas... (encarnado en los carlistas) contrarios al pensamiento liberal en el poder por esas fechas. También fue preludio a un nuevo asalto a las grandes propiedades ‘improductivas’ que los monasterios poseían. Lo hicieron a través de leyes de Desamortización, como la de Mendizábal[1] (1836-37), que afectaron básicamente a las propiedades pertenecientes al clero regular.
Con fecha 1 de enero de 1839 la Dirección General de Estudios del Gobierno Central acordó una serie de requisitos para que los religiosos exclaustrados y otros[2] pudieran establecer escuelas públicas de primera educación, u optar a las dotadas en los pueblos sin hacer los exámenes para maestros de primeras letras. Para eso tenían que solicitar el título acreditativo presentando los siguientes documentos: certificado de nacimiento, certificado de buena conducta, partida de bautismo y atestados del ayuntamiento y del párroco del pueblo de residencia, grados literarios, etc. para, a la vista de los documentos resolver si pueden ser eximidos o non del examen.

A raíz de esto parece ser que un monje exclaustrado, Lorenzo Pereira, residente en Cela eleva una instancia con la solicitud de exención de exámenes acompañándola de la documentación pertinente, a Jefe Político e Intendente de Pontevedra, José Valladares[3]. Este solicita a su vez al alcalde de Bueu, Salvador Marty, que le informe sobre la conducta política y moral del solicitante:
 Para resolver sobre una instancia presentada en este gobierno político por D. Lorenzo Pereira, religioso ex-claustrado del extinguido convento de Sn Francisco de Monforte, vecino de Sta María de Cela, he acordado que ese Ayuntamiento me manifieste cuanto le conste o pueda indagar sobre la conducta política y moral del suplicante, a quién hará V. entender que debe justificar por medio de certificación no hallarse sujeto al servicio militar.
que a V. ms a Pontevedra 26 de Agosto de 1939
José Valladares”

De la resolución administrativa nada sabemos. La respuesta a si estaba o non sujeto a la obligación del servicio militar si conocemos que ha tenido que ser negativa dado que en ese mismo año, Lorenzo Pereira estaba en las listas de la Quinta para ser soldado e en el reparto y sorteo de plazas, del 9 de febrero de 1839, celebrado en el Ayuntamiento ante el alcalde primero Manuel González, sale exento de la obligación del servicio obligatorio. 
Y con respecto a los titulados como maestros en el Ayuntamiento de Bueu decir que no figura como tal, al menos hasta el año 1844. Por lo que hasta ahora seguimos sin saber si le han dado o no el título de maestro de primeras letras.



[1] Juan Álvarez Mendizábal, ministro da regente Mª Cristina de Borbón.
[2] Sacerdotes secularizados de Escuelas Pías, graduados de bachilleres en facultades mayores…
[3] José Valladares Como Gobernador Civil también en este período era Presidente de la Diputación.

jueves, 1 de junio de 2017


Desde noviembre de 1967 a febrero de 1968 salió a la calle periódico-mural titulado La Esquina. El nombre se la habían puesto por pretender ser un “espacio o lugar en donde comentar, criticar, informar,...”.
Curiosamente comenzó a estar expuesto en la esquina frente a la de Ferrolán, (donde hoy está el comercio de “A de Rosita” -Rosa Diéguez-). En ese lugar se reunían para hablar, comentar, criticar, etc., cuando el tiempo lo permitía, las personas, fundamentalmente hombres, que frecuentaban los bares y cafeterías próximas a esta intersección de las calles Pazos Fontenla y Eduardo Vincenti (Ferrolán, Bar Fénix, Bar Santaclara, Fazáns, ...).

Como al estar a la intemperie y a la lluvia, la tinta y las acuarelas de los dibujos manchaban todo y se deshacía el papel, dieron en ponerlo, con la autorización de Luís Santaclara, en la sala de TV de su Bar.
Los talleres de impresión era el local de la capilla de San Xosé. L ‘tirada’ era de un ejemplar y la periodicidad, semanal. Los primeros tres o catro números eran un pliego de papel de tamaño DIN A1 (84,1 x 59,4 cm). Logo cada ejemplar pasó de uno a cuatro pliegos.
Los primeros ejemplares iban firmados con la autorización del alcalde José Mª Massó (idea que surgió de los mismos ‘redactores’ para ponerlo con tranquilidad y evitar posible problemas y sanciones).
Las informaciones eran columnas de noticias o de inquietudes de los jóvenes que lo confeccionaban relacionadas con la actualidad del momento, fundamentalmente de Bueu.
Ejemplo de una de esas noticias fue cuando apareció reproducida, como imagen de la noticia, el azulejo de la Biblioteca Popular que todavía puede verse en la puerta lateral del ayuntamiento. Pero la columna ‘periodística’ estaba relacionada con misterio y dudas de lo que podría haber dentro do local. Era una sátira por anunciarse una Biblioteca y nadie podía acceder a ella pues no existía como tal en la realidad.
Otros temas recurrentes tenían como tema las películas que ponían en la cartelera de los cines Avenida y Victoria. Para eso aprovechaban el folleto parroquial donde se hacía la cualificación moral de las películas y, a veces, se alguno del grupo había visto la película se hacía un pequeño resumen del argumento. También se llegaron a criticar las condiciones de las mismas instalaciones del cine como fue el caso del artículo de José Antonio García en el que se denunciaba, entre otras, el hedor y las malas condiciones de las butacas.
Los promotores, redactores, impresores, etc. que participaron en el fueron Paco González, José Riobó (Seso), Gonzalo Calviño, José Antonio García...