lunes, 27 de febrero de 2023

De muchos es sabido que desde los inicios de la constitución de los ayuntamientos los ciudadanos, a través des de estos, contribuían al pago de las Juntas de Instrucción Provinciales y nacionales, escuelas Normales de maestros, de centros universitarios, de cárceles provinciales, de mantenimiento de los vecinos en la milicia, de la construcción de todo tipo de carreteras y de un largo etcétera de cuestiones más.

Archivo M. de Bueu Ca. 132/4

Hace casi 180 años de que el juzgado de 1ª Instancia de Pontevedra le reclama a unos bueueses, por mediación de la alcaldía, unos pagos por gastos médicos y por otras ... La notificación a la que me estoy a referir indica que se avise la Benito M. para que pague 67 reales con 14 maravedís por ser este el importe adquirido por el reconocimiento que le hicieron unos médicos a consecuencia de la enfermedad que padeció en una pierna estando en la cárcel. Sí, leyeron bien, estando en la cárcel.

Lejos de mi ánimo es dar ideas para la Sanidad dentro y fuera de las cárceles.

Y eso es sólo la mitad del que debería pagar, pues la otra mitad la había satisfecho un vecino suyo, Rafael de la Torre.

Pero la ‘cosa’ no quedó en eso ya que, aprovechando esta notificación, se le añade una factura de 14 reales y 24 maravedís extensible también, la misma cantidad, al mencionado Rafael de la Torre, por reclamación del Alcaide de la prisión provincial por lo que les correspondía por su salida de esta cárcel.

Y como diría alguno más entendido: “que no se quejen, si hubiera sido un tiempo atrás, también tendrían que pagar, entre otras, la comida y hasta el sueldo del carcelero”.

¡Quién non se consuela es porque non quiere!