sábado, 1 de junio de 2019

Si en la prensa de hoy apareciera que a policía está buscando a alguna persona por tráfico de estupefacientes nos parecería una noticia más, sin apenas relevancia o que provoque excesiva sorpresa pues, aunque que no es algo habitual, si ocurre alguna vez algo semejante.
Lo que si nos llamaría más la atención es que estas substancias prohibidas fuesen “abortivas”. Pues eso ha sido lo que ocurrió en Bueu en enero de 1894.
El diario de la tarde, El Eco de Galicia[1] recoge la noticia del Diario de Pontevedra de forma textual:
 «Pocos días hace que, por personas del cercano puerto de Bueu, se tuvo noticia oficial en un centro de esta ciudad, de que en aquella villa había indicios bastante claros que atestiguasen la existencia de una persona expendedora de abortivos.

En efecto, hechas las oportunas averiguaciones, el hecho se confirmó y hoy se sabe que Bueu alberga una mujer llamada Concha que se dedica al terrible y criminalísimo tráfico que se denuncia.
En vista de confirmación tan importante se dieron órdenes de que fuese buscada y detenida la Concha en cuestión, quien noticiosa por lo visto de las pesquisas que la autoridad empezó a ejercer, abandonó su casa desapareciendo de Bueu.
La Guardia civil la persigue con actividad.»
Muchas de las noticias que aparecen en la prensa se diluyen en el tiempo y acabamos desconociendo como se han resuelto o cuales han sido las circunstancias que rodean el caso. Aquí nos ocurre lo mismo, poco más hemos sabido de la tal Concha… con la excepción de que se llamaba Concepción Mallo[2],  que tenía como apodo La Barajera y que fue detenida por la policía en Pontevedra dos días después de inicia su búsqueda.

[1] Eco de Galicia del 19 de enero de 1894 en la página 2.
[2] Gaceta de Galicia do 21 de xaneiro de 1894 na páxina 2.